88 días de trabajo
Cuando escribí la semana pasada todavía estaba en Sydney, ahora me estoy yendo a dormir a mitad de camino de la granja donde voy a trabajar por los próximos 3 meses.
Por donde empiezo
En los casi dos meses que estuve en Sydney, sentí que pasaron 8. Y en esta (casi) semana entera que pasó ya en Tasmania parece que pasaron meses. No se si atribuirle este cambio de percepción al rápido avance de las cosas, a lo diferente que es un día con el anterior o la distancia que tengo de ‘todo’ lo que conozco, ósea mi casa. Aunque lo cierto es que es un poco de todas.
Llegamos a Hobart, Tasmania el Miércoles anterior a las 9 am aproximadamente. El primer día lo usamos para conocer la ciudad, conocer gente en el hostel y también hicimos una excursión donde fuimos a ‘avistar’ ornitorrincos por el barrio de South Hobart pero no tuvimos la suerte de ver ninguno. Fue un lindo paseo igual por que nos adentramos en la pronta naturaleza de la ciudad, conocimos a los otros recién llegados y terminamos en una fabrica de cerveza que cumple 200 años este año. La fábrica parece un hotel embrujado de película.
Después obviamente fuimos al bar de la fábrica y nos tomamos una Cascade Stout con Mati y el resto del grupo. Marcó un lindo comienzo este día, al toque conecté con Tasmania por que las montañas me hicieron acordar a Tucumán y me sentí como en casa. Hobart es un lugar en el que pasaría más tiempo la verdad.
A su vez Tasmania es una isla de tamaño perfecto diría, lo suficientemente grande como para tener mucho para recorrer pero con distancias muy accesibles. De una punta a otra se tarda 5 horas en auto. Así que teniendo vehículo se convierte en un lugar muy interesante para pasarselas de aventura.
Los días siguientes hasta hoy fueron caóticos, aventureros y largos. Todos los días pasaban muchas cosas, aplicar a muchos trabajos, explorar opciones, hablar con miles de personas tratando de encontrar algo y aclarar dudas, salir a recorrer, salir de fiesta y ver como bajaba la cuenta de banco je.
Fue un hibrido de una semana de viaje, haciendo la experiencia del hostel y de rodearse con gente de todo el mundo (Holandeses, Koreanos, Uruguayos, Chilenos, Yankees, Españoles entre lo que mas frecuentamos) y a la vez estar en búsqueda de trabajo.
Hasta hoy a las 8am estabamos por separar caminos con Mati pero todo se resolvió en el minuto 90 +5.
Lo que se viene
Hoy nos despertamos con un mensaje de una señora ofreciendonos trabajo, alojamiento y auto en una granja al norte de Tasmania. Y en este momento me encuentro en Devonport, otra de las ‘ciudades’ de tassie. Entre comillas por que de ciudad tiene lo mismo que Recreo en Santiago del Estero.
Fue lo mas lejos que pudimos llegar hoy por que el unico omnibus que va a hasta el pueblo donde esta la granja es a las 2.15pm asi que mañana hacemos las conexiones y llegamos ahi, y el jueves seguramente arrancamos a trabajar.
El trabajo es en una granja de vacas, pero no de carne sino de leche. Nuestro trabajo principal, entiendo, va a ser ordeñar a las vacas. También vamos a hacer mantenimiento, algo de construcción de cercas y lo que vaya surgiendo. Cuando conozcamos a los dueños va a estar todo mas claro. Nos van a pagar lo mínimo pero nos ahorramos alquiler y quizás comida + nos van a dar muchas horas así que si todo sale bien van a ser meses de ahorro.
Por otro lado, filosóficamente, lo que se viene es un reto bastante grande. Acá todos me conocen y saben que tengo de granjero lo mismo que tengo de astronauta. Me gustan las ciudades y la tecnología y esto es todo lo contrario, pero la verdad es que estoy entusiasmado. Vine a Australia en búsqueda de estos límites, donde me salgo 100% de mi zona de confort y en donde voy a aprender mas sobre mi mismo y sobre el mundo en el que vivimos. No quiero pecar de positividad ingenua, se que realmente va a ser duro levantarse todos los días a las 6am con frío y trabajos físicos y poco agradables pero la verdad es que no me asusta ni me cambia el ánimo para mal.
Hoy cuando nos subimos al bondi, empecé a sentir estar viviendo realmente la experiencia australiana. Y ya 100% inmerso, quiero dejar sentados mis objetivos en estos próximos 3 meses:
Trabajar, extender mi visa y ahorrar mucho.
Hacer muchos videos, para quien no me siga en Tiktok.
Leer mucho, expectativa 1 libro por semana.
Por suerte va a ser. una experiencia compartida con Mati, que como dije hasta hoy a la mañana parecía que íbamos a separar caminos por que habíamos encontrado ya trabajos cada uno por su lado, lo cual va a facilitar pasar los malos momentos. Ayuda mucho hacer este tipo de cosas con amigos.
4 años y medio viajando a dedo
El guía que nos hizo la ‘excursión’ de los ornitorrincos era un Chileno que se llama Hilton y que tiene mas años viajados que yo vividos masómenos. Obviamente exagero pero ya lleva viajando unos 10-12 años.
En el paseo charlé bastante con el para aprender sobre Hobart y Australia en general y me terminó contando que el viaja solamente a dedo. Empezó en Argentina alla por el 2010, mas precisamente en el punto mas al sur del país y después de cuatro años y medio terminó llegando a Canada, como ya dije, a dedo.
No estoy escribiendo esto para contarles su historia sino para hablar sobre algo que me dijo que me dejó pensando y que me abrió mucho la cabeza. Me hizo revisar ciertas creencias que yo tenía sobre el valor que tenemos cada uno como personas y la percepción sobre eso mismo. Fue una frase que me la dijo al pasar, probablemente para el fue una conversación más.
En un momento, nos contó que su próximo plan era irse a Turquía a dedo desde Australia. Y yo le pregunte irónicamente sobre como iba a hacer dedo en avión pensando en que si o si hay que salir por aire de acá y el me contesto que planeaba hacerlo en barco.
Y ahi yo le pregunte si los barcos ‘hacían dedo’ y el me respondió que obviamente que no, sino que trabajaba por un lugar en el navío.
—Cuando son viajes largos por lo general uno tiene que ofrecer algo a cambio del aventón, y yo ofrezco desde lo más básico que es la compañía hasta pagar a medias la nafta o ser ayudante de cocina en un barco carguero.
yo ofrezco desde lo más básico que es la compañía
Las reflexiones me las guardo por que es tarde y ya me estoy perdiendo en lo que escribo. Si en algun momento aclaro mas la cabeza voy a tratar de volver a este tema pero quería compartir esto por que fue algo que me gusto escuchar. Siento que hay algo muy valioso en aprender a ser buena compañia y es parte de lo que se aprende de viajar solo, y de acompañarse de a momentos con quien uno se cruce en el camino.
Ahora veo un Norte
La semana pasada me sentía perdido, al borde del precipicio pero hoy, una semana después, veo de nuevo con mas claridad. No se por cuanto tiempo, por que la claridad va y viene, pero internamente estoy tranquilo y mas que nunca en el presente. La semana que viene vuelvo con novedades sobre las primeras experiencias en la granja y seguro con historias graciosas sobre todo lo que voy a hacer mal en el proceso de aprender a ser un granjero!!!
Hoy cuando dejamos el hostel
La semana que viene verán la llegada a la farm. Saludos y buena semana a todos!
Hola soy Cesar y esta es mi primera ordeñada
Excelente capitán